Ayuda a peder peso.
Las berenjenas son altas en fibra y contienen un bajo
nivel calórico, esto las convierte en una excelente adición a la pérdida de
peso. La fibra se esparce lentamente a través del tracto digestivo y promueve la
plenitud y la saciedad, reduciendo la ingesta calórica.
Las berenjenas también se utilizan comúnmente en
muchas recetas como un sustituto alto en fibra y bajo en calorías.
Colesterol y salud
cardiovascular.
Gracias a que contiene antioxidantes, estudios
sugieren que las berenjenas ayudan a reducir el riesgo de enfermedades
cardíacas. En un estudio, conejos con colesterol alto recibieron 0.3 onzas (10
ml) de jugo de berenjena al día durante dos semanas. Al finalizar del estudio,
tenían niveles más bajos de colesterol LDL (colesterol malo) y triglicéridos,
dos marcadores sanguíneos que al estar elevados conducen a un mayor riesgo de
enfermedades cardíacas.
Otros estudios han demostrado que las berenjenas pueden tener un efecto protector sobre el corazón.
Fortalece la salud cerebral.
Son muy buena fuente de fitonutrientes, y estos
estimulan la función cognitiva y la salud mental. Las berenjenas incrementan el
flujo sanguíneo del cerebro, aumentando pensamientos analíticos y el poder de
la memoria. En algunos lugares se le conoce como “alimento para el cerebro”, gracias
al potasio las berenjenas actúan como vasodilatador y estimulante del cerebro.
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